viernes, 27 de junio de 2014

Una educación para fomentar la creatividad


Una  de las etapas más importantes dentro de la vida de las personas es la primera infancia; es ahí en donde las personas desarrollan toda su creatividad, exploran, crean e imaginan, pero esto ¿Es algo innato o es un trabajo que debería ser guiado?
La verdad es que las personas nacen con una capacidad innata de creatividad, pero que con el tiempo se va debilitando hasta volverse mínima.  Las personas se adentran en un mundo cuadrado, en un sistema rígido, poco flexible y sin mentes libres, en donde se busca que todas las personas sean iguales y cumplan con las mismas características; es un sistema que limita la creatividad y el fluir mental de las personas.
Anteriormente, antes de la segunda mitad del siglo XVIII las personas basaban su trabajo en la agricultura, la artesanía y todo aquello relacionado con la elaboración manual de productos. Las personas se dedicaban a crear sus propias pertenencias o existían personas que se dedicaban al arte de confeccionar, reparar, elaborar, etc. Sin embargo durante la segunda mitad del siglo XVIII surge un nuevo proceso en el desarrollo económico basado en la manufactura, al cual llamamos industrialización.  
Es durante la industrialización en donde las maquinas surgen como elemento facilitador de fabricación de elementos. Para la economía y el comercio las maquinas era el elemento más brillante, las práctico y más eficiente, ya que podían elaborar cientos de elementos en un santiamén. El producto de una máquina era elaborado en grandes cantidades, requería poco tiempo, era vendido a un precio que dejara ganancias, es decir, la industrialización era una mina de oro a los ojos de la economía.
El común de las personas que basaba su vida a la agricultura y la artesanía, aquellas personas que vivían de su propio negocio, de su propio empleo y su técnica fueron afectadas totalmente, ya que la industrialización basaba su ciencia en la manufactura. La manufactura es un proceso mediante el cual se fabrica un producto utilizando máquinas, para posteriormente ser destinado al mercado o comercio.
Pero ¿En que radica todo esto de la industrialización en el desarrollo de la creatividad de las personas?

Bueno, esto de la industrialización generaba en las personas un estado de reposo mental en donde no debían emplear su mente para pensar, sino que solamente debían ejercer una acción física determinada durante horas y horas. Es por eso que uno de los factores que más marcó negativamente y limitó la creatividad de las personas fue la industrialización. De ahí en adelante, el fin de la educación solamente tenía como propósito generar una sociedad mecanizada, basada en limitaciones mentales y preparadas para enfrentar la vida laboral como robots programados que solo se dedicaran a ejercer acciones físicas, pero no a crear y dejar fluir el pensamiento.  
Pero ¿Cómo podemos o como se debe revertir esta situación? Existen diversas formas de cómo las personas pueden potenciar su creatividad e innovar, y en ello tiene profunda vinculación la educación.

La educación es la herramienta que todas las personas debieran adquirir para para enfrentar la vida y todo lo que esta conlleva, sus desafíos, sus relaciones y sus dilemas y controversias, pero la educación debe comenzar desde los primeros años de vida de las personas, es ahí en donde en base a la experiencia, la manipulación y la Vivenciación se deben potenciar aspectos claves de la imaginación y creatividad, para que a largo plazo el mundo tome diversas perspectivas. 

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